No somos nadie para dar lecciones. Es tiempo para el respeto, la generosidad y la humildad. Seguramente estos momentos que estamos viviendo son los más difíciles que ha enfrentado la población mundial. Sólo le superan las guerras y los genocidios. Vivimos continuamente de cerca la enfermedad y la muerte. Y vivimos en contacto directo con el paro y con la más cruel realidad de…
