Jerarquia y liderazgo en seguridad
Jerarquía y liderazgo en seguridad
La historia se ha encargado de construir a lo largo del tiempo un conjunto de creencias respecto a la jerarquía que forman parte de nuestra cultura y poco nos cuestionamos su naturaleza.
Desde hace siglos, la jerarquía se ha configurado como un sistema de órdenes y poder. O al menos, sólo, se ha considerado desde esa perspectiva.
En los cuerpos de seguridad y emergencias así como en el ejército, la jerarquía es un modelo intrínseco y natural para su organización. Aunque también está presente en la mayoría de empresas y organizaciones.
La jerarquía establece el “cómo” una orden, se transmite desde arriba hasta abajo de la organización de forma ordenada.
Esto permite que especialmente en cuerpos de seguridad, ante situaciones de emergencia, se asegure que el criterio que se transmite llegue a toda la cadena de mando. También por el volumen de personas que forman este tipo de organizaciones, las instrucciones de funcionamiento se transmiten siguiendo este modelo.
Hay dos conceptos clave que no se pueden confundir:
- Puesto de trabajo con persona que lo ocupa
- La jerarquía no anula la necesidad del liderazgo de cada mando y de cada persona de la organización.
Pero existe un elemento aún más importante:
No se puede utilizar el modelo jerárquico como un modelo autoritario para dar órdenes cancelando, humillando y menospreciando a las personas.
Por eso es necesario comprender que la jerarquía permite asegurar y ordenar las tareas y las responsabilidades en la organización.
El desarrollo de liderazgo de cada mando es necesario para gestionar los equipos y problemas que se les presenten. También permite comprender que las “instrucciones” u “órdenes” que llegan desde los máximos mandos deben cumplirse por el bien de la organización, aunque no siempre se comprendan.
Todo esto es necesario y es imprescindible que todos los mandos en todos los niveles jerárquicos trabajen y desarrollen su liderazgo. Desde el primero al último mando.Y es aquí donde está el verdadero “quid” de la cuestión.
Las organizaciones jerárquicas deben ser muy cuidadosas eligiendo a las personas que deban ostentar la máxima responsabilidad. Si esta selección no están hechas con criterios profesionales y con Liderazgo Transformacional , el modelo acaba siendo autoritario y sin sentido.
En mi blog comparto reflexiones y pensamientos sobre los fundamentos que han de garantizar el buen funcionamiento de las organizaciones, situando en el centro a las personas y poniendo énfasis en la dirección por valores y en el liderazgo de los directivos.
En un momento como el actual, el respeto, la potenciación del talento y el establecimiento de relaciones de confianza son necesarios para el éxito de las empresas.